miércoles, 2 de abril de 2014

LA RADIO Y SU INAPELABLE PODERÍO SOBRE TODOS LOS TIEMPOS.

POR EVELING NOEMÍ BONILLA VILCHEZ

Debe entenderse la radio como más que un medio de comunicación masiva: es la línea interceptora de cultura, de conocimiento y de información. Puede y debe ser visto desde muchas ópticas debido a su compleja composición y utilidad. Muy a pesar de que la televisión logró apoderarse de una mayor atención por parte de la sociedad, aún hay mucho que explotar de la radio y para ello haremos un breve repaso de lo que fue la radio, de lo que es y de lo que se podrá convertir en el futuro.
¿Por qué la gente dejó de usar la radio como medio de interculturalidad? ¿Acaso sus días están contados? ¿Qué otras potencialidades han descubierto investigadores sobre la radio? ¿La radio debería ser vista solo como un instrumento difusor de publicidades? ¿Acaso no es este medio de comunicación masiva el portavoz de información y entretenimiento a los hogares del mundo? ¿Qué otros roles cumple en el Siglo XXI?
Para comenzar, la naturaleza de la radio ha sido un asunto del cual se han encargado muchos autores, algunos le han agregado un valor antropológico, formativo y científico, otros se han fijado en sus propiedades de difusión y por ende en su potencial para llegar a más lugares dejándose guiar por intereses capitalistas. Ya sea de un lado u otros, ambos intentan darle un uso amplio a la radio.
La radio fue hecha para el hombre, mas el hombre no fue creado para la radio; decir que la radio es difusión e instantaneidad es ser mezquinos. La radio desarrolla todos los sentidos, cosa que no hace la televisión, pues esta “cajita mágica” solo agudiza la visión y la audición, y nos distrae de lo que ocurre a nuestro alrededor: Estamos tan enfocados en ella que dejamos de lado a los que están a nuestro lado, tanto así que podemos comer en familia pero sin interacción entre nuestros miembros, solo la tv se convierte en nuestro centro de atención. La manera como se relaciona la radio con el hombre produce en él una hermenéutica debido a los componentes de la misma. El OÍDO es por excelencia el sentido que más desarrolla la radio. Así mismo la VISIÓN, pero de la MENTE: nadie explota más la creatividad que la radio y si hablamos de competencias para provocar mejores resultados en la sociedad es ella la ganadora.

La forma y fondo de la radio es materia de estudio por la ciencia, desde el lenguaje- mensaje hasta la estética, ambos se vuelven piezas fundamentales en su vasto éxito, por lo tanto no se pueden separar. A raíz de ello cabe mencionar su sentido interdisciplinario.

Pero hablando un poco de dichas investigaciones, es lamentable que muchas de ellas lleguen a la conclusión de que su uso debe ser netamente comercial, esas radios que emiten música, que hacen concursos para ganarse un desayuno o que suelen tener contenidos superfluos. Las cifras se alteran y los números de los billetes saltan cuando de rating se habla, son los dueños de aquellas emisoras quienes mejor se acomodan a esa pequeña propiedad de la radio.

No hay derecho entonces. La radio es, tal vez, el mejor y más eficiente nexo entre las culturas, entre los seres humanos, entre en hombre mismo a manera introspectiva. Las radios comunitarias son un claro ejemplo de ello, las radios escolares o universitarias, donde se busca empoderar en base a una plataforma sostenible de dialogo social.

Diremos que en un inicio la radio procreo GÉNEROS tan beneficiosos, como el radio teatro y la radio novela en Alemania o las numerosas radios comunitarias en muchos países de Sudamérica, siendo esta una época gloriosa para la radio, y sus formas de llegar al público se volvían más creativas a medida que producían mejores ciudadanos. No olvidemos de aquellos que hicieron posible todo esto, los pioneros de la radio. Tiempo después, con la llegada de la televisión, las cosas cambiaron debido al boom de la imagen digital. Se devaluó el valor de la radio y muchos creyeron que era su fin teniendo como pretexto su incapacidad de mostrar las cosas en una imagen que capture más la atención.

Pese a todo esto la radio es y seguirá siendo el mejor aliado del hombre para volverlo más humano, más creativo, más sensible. La plataforma que produce es ilimitada debido a su cercanía con el público, es magnífica su cobertura y su alcance a los hogares, las familias, es impresionante como puede congeniar con cualquier contexto y asimilarse a la problemática de ellos, siendo mediador, vocero, representante, en fin, identificándose con ellos. Por lo tanto decir que la radio está muriendo es mentira, se está reinventando que es diferente, y en esta modificación se encuentra su poderío que nunca, por más que pasen los años y se agreguen otros medios de comunicación masiva, dejará de existir.



RADIO: DOS DÉCADAS DE LUZ

POR EVELING NOEMÍ BONILLA VILCHEZ

Hablar de radio sería en un principio hablar de comunicación, música, información y entretenimiento pero esto no es más que la noción material y primera de este medio, que ha sabido llegar a los lugares más recónditos de la tierra. Hablemos entonces de la radio como un instrumento portador de luz que cumple, a la vez, con sus funciones primarias, pues en muchos países y, con mayor vigor, en el Perú, la radio realiza la labor de iluminar las mentes de quienes no acceden a la vitrina audiovisual (conocida comúnmente como TELEVISIÓN). La empresa radiofónica muestra distintos matices en nuestro país: de carácter netamente informativo, musicales, híbridas, de entretenimiento, religiosas, etc. En sus inicios, dentro de la escena nacional, este monstruo sonoro ha soportado los vertiginosos avances tecnológicos que han desplazado otros medios de comunicación, mas, claro está, sin lograr desaparecerlos... ¿Cómo fue su llegada a los hogares peruanos?, maravillémonos con su resistencia tenaz e infranqueable al tiempo y lugar.

Luego del primer cataclismo mundial se establece muy claramente la línea divisoria entre radiotelegrafía y radiodifusión. Es entonces cuando, en el mundo, se inicia el debate sobre los modelos de radiodifusión. Estados Unidos opta por elegir un modelo visiblemente privado dando potestad de su uso a empresas particulares a la vez que en Europa existían desavenencias en cuanto a  un modelo único; Francia se inclinó por un modelo mixto, España por un monopolio privado. También, por ejemplo, existieron países como Inglaterra que esbozaron ideas de mantenerla en el régimen público. En el Perú se eligió, para bien o mal, un modelo privado.

La radiotelefonía antecede a la radio, Heinrich Hertz (descubridor en las ondas eléctricas) es el pionero en las transmisiones sonoras y quien sentaría las bases para la construcción de esta. La radio nace con la necesidad de comunicación que genera la primera guerra mundial (1914-1918), aunque es en 1915 es que se emite la primera transmisión, además el primer laboratorio de radio es hecho en Long Island, EE.UU en 1919, posteriormente en 1921 se instala una estación radial en la hermosa Torre Eiffel. En Latinoamérica este portal de la comunicación tiene sus inicios en 1921 y 1922 porque algunos gobiernos nacionales aceptan de manera oficial la transmisión de emisoras diariamente (Cuba, Chile y Uruguay), luego en 1923 se sumarían a la lista Argentina y Brasil, para que en 1925 el Perú haga lo mismo.

En 1924 se creó la Peruvian Broadcasting Company con el único fin de abarcar la totalidad de radiotelefonía en el país. El gobierno facilitó la adquisición de todos los derechos y concesiones de la Marconi Wireles que hasta entonces era dueña de todo lo referido a la "radiotelefonía", así fue que esta compañía por esos años fue dueña de un monopolio radial. En los meses siguientes se recibió la noticia de la creación de una estación radial, aumentando aún más el entusiasmo de los peruanos aficionados a dicho medio comunicacional. El 20 de junio de 1925 la primera radio del Perú inició sus transmisiones, se llamaba OAX pero no prosperó pues los anuncios pagados costaban mucho, y su programación de música clásica y eventos culturales no tenía el efecto esperado en la audiencia. En 1926 se disolvió la Peruvian Broadcasting Company, el gobierno delegó sus funciones anteriores nuevamente a la Marconi Wireles. Para 1930 el gobierno militar dispone que la radio sea administrada totalmente por el estado, aunque un año después la OAX es puesta nuevamente en manos privadas. En esos años se dio pie a conceder licencias a otras empresas. La radio no tuvo gran acogida en ese lapso debido a la gran crisis económica.

Aparecería por la década de los 30 la Radio Nacional del Perú. Asimismo hubo muchas otras contemporáneas a esta. En 1935 Marconi terminó su pleito con el gobierno y se hizo nuevamente con la administración de las comunicaciones en el país. Con ello empezaría la segunda etapa de la radio en nuestro país, la llamada “etapa de oro” (1937-1956), y la anterior (1925-1937) considerada “etapa de formación”. Para 1937 la radio tomaría un tinte comercial y, al fin, masivo; se dedicó a entretener a la audiencia con nuevos modelos de programación y con mayor difusión entre los diversos grupos; a partir de ese momento la radio se hizo un medio de alto consumo.

          Habiendo realizado una recopilación de los dos decenios de la Radio en el Perú, nos damos cuenta que en su génesis no tuvo la acogida esperada y, ciertamente, el mismo fenómeno se vio en otras sociedades. Es en esta pequeña era de gestación que la radio adquiere su fin principal: EL ALCANCE MASIVO. Seguramente en este momento histórico muchas personas se hicieron la pregunta: ¿Cómo y de qué forma la radio cambiaría la vida en sociedad del pueblo peruano?, pues hasta hoy en lugares alejados, por ejemplo, en la sierra, los campesinos van provistos de sus herramientas de trabajo junto a la infaltable compañía de una radio portátil, que llena sus momentos de nostalgia por la soledad del camino o alegra su día a día con la programación emitida. En el Perú y el mundo éste instrumento sonoro ha sido de gran ayuda para progresar; las personas ya la reconocen como algo especial y es que ha llegado a los confines de la vasta esfera azul sin mostrar señales de querer desaparecer.

La radio, en el Perú, ha tenido labor de iluminar las mentes de los peruanos, llevándoles esa canción que está de moda, el acontecimiento más importante del día, o el partido de Perú en aquellas olimpiadas del 36, o el anuncio de precios tras el shock de los 90. En fin la radio no ha perecido en nuestro país y ha sobrevivido sus albores tormentosos, ha sorteado exitosamente todo avance tecnológico o dictadura, es, y está demostrado, el medio de comunicación por excelencia, desde su primera emisión el 20 de junio de 1925 a las 11 y 30 de la mañana y al compás de los acordes grandísimos del himno nacional; la radio, ocupa un lugar portentoso en la historia y vida de la patria, porque durante años ha llevado su luz  que simboliza verdad y le da VOZ a todos los peruanos desde Tumbes hasta Tacna.

LAS "OTRAS RADIOS”: ¿Formatos de reivindicación ciudadana o entradas de propaganda subliminal?

POR EVELING NOEMÍ BONILLA VILCHEZ

Todas las mañanas, mi abuelita, así como los muchos moradores de caseríos, distritos o provincias,  se levanta temprano y lo primero que hace es prender la radio, sintonizando en el dial la frecuencia AM donde se transmiten programas de cobertura local o regional, donde seudos locutores inician sus “magnos discursos” sobre la problemática social de estos lugares e incitan a los radioescuchas a formar parte de su opinión que, en la mayoría de los casos, consiste en atacar, violentar, vejar a otros que no estén de acorde a su punto de vista; sin darse cuenta, mi abuelita y los otros cientos de pobladores rurales, son manipulados y dopados para formar parte de la masa que “obedece” a el falso “asesor del pueblo”.
Es la realidad del Siglo XXI, pues ahora ya no es necesario tener un título para ser comunicadores, solo basta con tener una idea y ejercer dominio sobre un público que siga tu lineamiento o que pueda ser persuadido con facilidad para que puedas ejercer el periodismo. Es triste ver como a lo largo de los años esta carrera tan interesante y de resaltante valor social se vea comparada o, en ciertos casos, superada en número por “ignorantes de la información”, personas que consideran que estar detrás de un micrófono y quejarse a nombre del pueblo es hacer PERIODISMO y ser INTEGRADORA SOCIAL, cuánta indignación en el deterioro de la radiodifusión actual.

Y ¿Por qué no nos damos cuenta de esta situación? A lo mejor desconocemos del poder que estos programas ejercen en la colectividad o no queremos aceptar lo mucho que influyen en nuestro quehacer diario, haciéndonos formar parte del grupo que manifiesta su inconformidad con autoridades, su desacuerdo con robos, muertes, violaciones, en fin, todo el descontento colectivo. Al no saber qué hacer o no querer hacer algo mejor es que escuchamos lo que nos cuenta un tipo cualquiera que, válgase el adjetivo, “malogra las mentes” con el mensaje que emite. Y lo peor es que estamos tan acostumbrados a seguir en lo mismo que cuando dice: rana, nosotros saltamos.

En el Perú, esta situación, descrita anteriormente, repercute en la mayoría del territorio y demuestra que somos un país con poco juicio crítico, que cada día crece y se expande pero no en base a ideas individuales sino de MASAS. La radio es el MEDIO DE COMUNICACIÓN MASIVA más extendido en nuestra nación debido a la creciente tecnología y el bajo costo de los equipos radiofónicos, junto a las políticas liberales de carácter comercial que aceleran la creación de más estaciones y nuevos emprendimientos (sociales, indígenas, ONG, religiosos, etc) pues la diversidad sociocultural que nos rodea necesita EXPRESARSE.

Los modelos de radio son 3: EL COMERCIAL que son las radios que obtienen sus ingresos económicos en base a publicidad, con fines de lucro y grandes audiencias; EL PÚBLICO es propiedad del estado y le sirve a él, no está orientado a responder por el pueblo ni a la participación ciudadana; y EL COMUNITARIO diversifica su financiación, además sus oyentes son partícipes de lo que emite la emisora, no buscan lucro. Aparece el termino: “Las otras radios” y  son aquellas cuyo formato no se asemeja a la de la radio con fines de lucro (comerciales) que necesita una gran audiencia.

Algunos dueños de estas radios son empresarios que empiezan este negocio por ajustarse a los gustos de formatos de pequeños públicos, por ejemplo, si le gusta un tipo de música pero no hay estaciones donde puedan escucharla entonces su radio emite ese género musical; suelen recurrir a  concesionar espacios radiales por un monto mensual o diario, sin importar, en cierto casos, si los locutores saben hacer radio o no; y, mayormente, funcionan solo con una licencia social (aprobación de la población pero no la legal).

También existen las radios de comunidades campesinas y nativas, que presentan propuestas de grupos, incentivan a la sociedad y al PROCESO SOCIOCULTURAL que atraviesan pues fortalecen la comunicación interna, las relaciones con municipios, gobierno regional, iglesia y empresas que trabajan en su territorio.  Se supone asumen el Rol de reivindicación social con la difusión de  su cultura (música, costumbres). Su cobertura es limitada (FM y localidades, no toda la comunidad), y no tienen la capacitación formal para hacer radio, la utilizan solo como expresión.  Un punto importante es la aprobación de LA LEY DE RADIO Y TELEVISIÓN que contempla la radiodifusión comunitaria como expresión rural pero el Ministerio de Transportes y  Comunicaciones no facilita los trámites para el rápido funcionamiento de estas.

Otra intervención rápida es por parte de la Iglesia en el contexto radial, cuya misión es llevar la palabra del Señor. Pueden presentarse como: Eclesiales pues hablan de la Sagradas Escrituras, rezar el rosario o transmitir una misa; evangelizadoras, persuaden a los oyentes a acercarse al llamado del Señor; Radios ciudadanas que abogan por el pueblo y Radios populares o educativas que incluyen en su repertorio programas educativos o de instrucción al pueblo.

Para finalizar la clasificación, citaré a las Radios municipales (o del alcalde), que se convierten en instrumentos de difusión y propaganda de la gestión edil por razones como: 1. Necesidad de las autoridades de informar sobre su gestión. 2. Brindar entretenimiento a la población. 3. Instrumento propagandístico  que beneficia su gestión política (su hay alguna radio que no lo apoya, se usa esta para criticar).

Es entonces que la RADIO ya no solo es promotora de cultura, arte, música, información, sino que se convierte en entidad con fines económicos, sin respeto (en su mayoría) por las funciones básicas que necesita cumplir. Hay una  ausencia de lo público pues ya no existen solo para el pueblo, también defienden intereses particulares (un gobierno o línea política que los financia). Se da paso a un versus entre: la radio como medio de comunicación de masas que brinda un mensaje complejo y de alcance múltiple; y la radio como empresa privada, que busca monopolizar mercados, minimizar a su competencia, una mayor audiencia aunque sin interesarse en educarlos, formarlos, hacerlos competentes.


Fomentar la investigación para disminuir los intereses propios, abarcar problemas sociales contra la publicidad pagada por el gobierno; masificar información para obtener ayuda en lugar de hablar “sandeces” solo por conseguir más seguidores. Considero que el único medio de cambio es aquel que necesita la reforma. Nadie puede cambiar a la radio, ella sola debe purificarse, asimilar lo bueno y renacer de sus cenizas.

EL IMPERIO INVISIBLE DE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN

POR EVELING NOEMÍ BONILLA VILCHEZ

A lo largo de los años, las civilizaciones modificaron su visión del mundo, de la sociedad. Pasaron de, por ejemplo, una economía basada en el trueque o intercambio de bienes y/o servicios a la compra y venta efectuando por ello un pago (moneda), o de un gobierno autocrático a uno democrático. No fue una excepción a esta modificación temporal, la socialización, el interactuar con otras civilizaciones, informarse para adquirir conocimientos.
Tiempo atrás una persona no tenía acceso a ningún hecho que no haya observado, por ello era más fácil comentar una realidad parcializada y/o conveniente. Los campesinos, quienes no conocían más allá que los límites de sus tierras y/o sus vecinos, ignoraban que ocurría a 1000 o 10 000 kilómetros a la redonda; y cuando los soldados y/o los mercaderes llegaban por su circunscripción contando sobre sus hazañas o su encuentro con monstruos o cíclopes pues lo daban por cierto, porque no había como probar que no lo sea. Era la desventaja de no poder ver lo que sucede en otros lugares.

Pero esta situación no duro mucho. Con el transcurso de los años se desarrolló considerablemente el uso de vías o medios donde la información de un lugar pueda llegar óptima y fluidamente a otro. En la Edad Media existían los juglares, personas que tenían como oficio el cantar hechos, relatos de pueblos aledaños y, casi inconscientemente, darles información. Uno de los primeros MEDIOS DE COMUNICACIÓN. Entonces, desde la antigüedad, como los primeros hombres que para comunicarse no utilizaban la escritura sino los dibujos, los seres humanos buscamos constantemente como relacionarnos entre nosotros, es algo innato, y con el invento de la escritura se acentuó esta situación. En la actualidad estamos enfrascados en la REALIDAD que los Medios elaboran, donde pocos hemos intentado elaborar juicios sin la necesidad de que algún medio de comunicación lo hiciera por nosotros, nos manipulan y dejamos que lo hagan, somos dependientes de ellos y, si esto sigue en aumento, pronto nos convertiremos en esclavos de la tecnología, seres sin juicio ni opinión, robotizados.

El primer gran paso para conseguir la amplificación de los medios fue pasar de lo escrito (PRENSA) al sonido (RADIO). Las personas sentían mayor satisfacción escuchando que leyendo pues así podían conectarse en un plano más emocional, directo y no distante y unidireccional (periódico). En un primer momento se usó la escritura, que atrapaba ideas, todos podían leer siempre y cuando sepan hacerlo, pero, por ejemplo, a pesar de leer la Biblia no pudieron escuchar a Jesús contando sus  parábolas o las arengas de Moisés. Con la fotografía se captura la luz, su importancia radica  en recordar el rostro de las personas que, luego de largos años de ausencia, se borran de la memoria (DAGUERROTIPO). Continua el sonido, cuya prioridad se masifica con la invención del Telégrafo y la CLAVE MORSE; posteriormente se inventa el teléfono, permitiendo que la voz humana vaya y regrese sin ningún ALFABETO para descifrarla (no usaba la Clave Morse), pero a pesar que el sonido rompe la distancia (porque puedo conversar con un amigo que esté en Australia) no rompe con el tiempo; entonces aparece el fonógrafo, haciendo que el sonido se inmortalice pero con límites puestos en la materia (los cables).

Cuando se rompió la barrera de los cables como medio físico del transporte del sonido, se habla de un ADELANTO, el cual trajo consigo la creación de “Tubos de Vacío” con los que surgió la RADIO. Pensar que cuando comenzaron las primeras transmisiones radiofónicas no se podían imaginar la magnitud que traería consigo aquel invento, que acompañaba a masas, entretenía familias, brindaba información fresca a multitudes expectantes, estaba en todo momento, en todo lugar. Lo que vino después es la continuación de esta revolución tecnológica con la invención de la televisión, la cual se comparaba a la radio pero con el complemento de la parte visual, la perfecta competencia para los locutores eran los conductores de TV que aparte de ser escuchados también eran observados. Mas la radio nunca muere, ni lo hará, solo se modificó y se personalizó ya que cabe en un bolsillo o cartera. Los medios no se suplantan, solo se acomodan.
Entonces, habiendo realizado un recuento del avance de los medios hasta la actualidad, son 3 los roles que estos cumplen en la sociedad del Siglo XXI: Legitiman lo que transmiten, establecen la realidad y representan a los ciudadanos. No hay persona más confiable que aquella que aparece en el noticiario que vemos diariamente, lo que informe será ley, le damos credibilidad por el hecho de estar en pantalla porque los medios de comunicación se convierten en mediadores del pueblo y el poder, presentando, explayando y armonizando los conflictos sociales. Ahora el ser mediático te da brillo, avala tu palabra, maximiza tu prestigio, te da PODER.
La finalidad de la prensa y, posteriormente, la televisión es formar OPINIÓN PÚBLICA, pero estamos sometidos y creemos en lo que los medios nos dicen, no cuestionamos lo que oímos en la radio o vemos en la TV. Es tanto el apogeo de los medios que hasta los políticos recurren a ellos en busca de “espacio” para poder presentarse a las personas y “formar una imagen positiva” en sus mentes; la sinceridad es un concepto que no existe, se muestran personas siguiendo un guion o actuando una “realidad” que muchos damos por cierta. Y es que ahora los medios ven a las noticias como mercancía y dejan de lado la responsabilidad de informar para el BIENESTAR SOCIAL. Lo peor de todo es que con el adelanto tecnológico vino el retraso del juicio crítico de las personas.

La prensa es el CUARTO PODER, prevalece en las sociedades porque otorga beneficios a los que están involucrados en sus páginas, en las pantallas, detrás de los micrófonos; pero este poder está rebosando de sus manos, aumentando cada vez más, tanto así que se puede considerar el primer poder o tal vez el segundo, recalcando que sin ella no se puede llegar al primero. Páginas de páginas en un periódico que solo hablan de muertes, asaltos, robos, espectáculos, la farándula prima, y en los programas de televisión unas chicas con cuerpo de gimnasio y unos corpulentos hombres roban los corazones, se ganan al pueblo solo por ser parte de este medio, nadie se preocupa por conocer de economía, arquitectura, cultura... ¿Qué clase de ciudadanos estamos siendo formados? ¿Qué hace falta para darse cuenta de la realidad tal como es y no la que visualizamos a diario?  Parece que dentro de unos años seremos masas de ignorantes, monótonos seres que no tendrán actuar ni pensar propio, una des evolución del homo sapiens sapiens, que condena.